Mayo 14 de 2022
Recordando instrucciones.
Josué 14:1-5
Esto, pues, es lo que los hijos de
Israel tomaron por heredad en la tierra de Canaán, lo cual les repartieron el
sacerdote Eleazar, Josué hijo de Nun, y los cabezas de los padres de las tribus
de los hijos de Israel. 2 Por
suerte se les dio su heredad, como Jehová había mandado a Moisés que se diera a
las nueve tribus y a la media tribu. 3 Porque
a las dos tribus y a la media tribu les había dado Moisés heredad al otro lado
del Jordán; mas a los levitas no les dio heredad entre ellos. 4 Porque los hijos de José fueron dos tribus, Manasés y Efraín;
y no dieron parte a los levitas en la tierra sino ciudades en que morasen, con
los ejidos de ellas para sus ganados y rebaños. 5 De
la manera que Jehová lo había mandado a Moisés, así lo hicieron los hijos de
Israel en el repartimiento de la tierra.
Josué 14:1-5
Las demás tribus de Israel recibieron
porciones de tierra en Canaán asignadas por el sacerdote Eleazar, por Josué,
hijo de Nun, y por los jefes de las tribus. 2 Esas nueve tribus y
media recibieron sus porciones de tierra mediante un sorteo sagrado, según el
mandato que el Señor había
dado por medio de Moisés. 3 Moisés ya les había asignado una porción
de tierra a las dos tribus y media que estaban al oriente del río Jordán, pero
no había entregado ninguna porción a los levitas. 4 Los descendientes
de José se habían separado en dos tribus distintas: Manasés y Efraín. Y a los
levitas no se les dio ninguna porción de tierra, únicamente ciudades donde
vivir, rodeadas de pastizales para sus animales y posesiones. 5 De
modo que se distribuyó la tierra exactamente según las órdenes que el Señor había
dado a Moisés.
Estimado lector:
Aun antes de entrar a la tierra prometida, Dios
ya había establecido la manera en la cual se repartirían la tierra las tribus
de Israel en esta, había sido una instrucción dada a Moisés. (Nm 34:13-18).
Después de esta instrucción pasó algún tiempo, pasaron muchas pruebas,
conquistaron nuevos territorios de la mano del Señor, incluso Moisés, quien
había recibido la instrucción, ya estaba muerto.
El pueblo pudo no entender en aquellos momentos
por qué se hacía de esta manera la repartición, por qué ubicados de esta
manera, pero decidieron ceñirse a la palabra que Dios les había entregado,
sometiéndose a la instrucción.
En lo dicho a Moisés, la participación de Josué
estaba incluida, y ahora bajo un nuevo rol, el de líder y guía del pueblo,
Josué pudo haber olvidado la instrucción o querer hacerlo de otra manera,
después de todo era ahora quien tenía el mando. Más Josué no solo recordó la
instrucción que había recibido Moisés, sino la que él mismo recibió, “no
desviarse a derecha ni a izquierda”. (Josué 1:7).
En ocasiones, por el paso del tiempo y las
ocupaciones solemos olvidar las instrucciones de Dios acerca de cómo debemos
abordar una situación. Es un buen tiempo para hacer memoria y recordar que si
lo que estamos haciendo, es a la manera de Dios. Después de todo la mejor
manera de hacer las cosas, es a la manera del Señor. ¡Atesorar sus
instrucciones, es la mejor manera de avanzar!
Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.
¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele
Dios podría estar hablándole de Él
Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”
Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”