Noviembre 24 de 2020
Fecha: Noviembre 24
Título: Una marca inamovible del pacto.
Texto: Génesis 17:9-14
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Génesis 17:9-14 (RV’60)
9 Dijo de
nuevo Dios a Abraham: En cuanto a ti, guardarás mi pacto, tú y tu descendencia
después de ti por sus generaciones.
10 Este es mi pacto, que
guardaréis entre mí y vosotros y tu descendencia después de ti: Será
circuncidado todo varón de entre vosotros.
11 Circuncidaréis, pues, la
carne de vuestro prepucio, y será por señal del pacto entre mí y vosotros.
12 Y de edad de ocho días
será circuncidado todo varón entre vosotros por vuestras generaciones; el
nacido en casa, y el comprado por dinero a cualquier extranjero, que no fuere
de tu linaje.
13 Debe ser circuncidado el
nacido en tu casa, y el comprado por tu dinero; y estará mi pacto en vuestra
carne por pacto perpetuo.
14 Y el varón incircunciso,
el que no hubiere circuncidado la carne de su prepucio, aquella persona será
cortada de su pueblo; ha violado mi pacto.
Génesis 17:9-14 (NTV)
9 Entonces Dios le dijo a Abraham: «Es
tu responsabilidad obedecer las condiciones del pacto. Tanto tú como todos tus
descendientes tendrán esta responsabilidad de por vida.
10 Este es el pacto que tú y tus
descendientes deben cumplir: todo varón entre ustedes debe ser circuncidado.
11 Debes cortar la carne del prepucio
como señal del pacto entre tú y yo.
12 De generación en generación, todo
varón debe ser circuncidado al octavo día de su nacimiento. Esto incluye no
solamente a los miembros de tu familia sino también a los siervos nacidos en tu
casa y a los siervos extranjeros que hayas comprado.
13 Todos deben ser circuncidados.
Llevarán en su cuerpo la marca de mi pacto eterno.
14 Todo varón que no sea circuncidado
será excluido de la familia del pacto por romper el pacto».
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COMENTARIO
Estimado lector:
La circuncisión
que implicaba la remoción del prepucio en el varón era la marca de un pacto.
Todos los varones de la casa de Abraham fuesen libres o esclavos, tuvieron que
ser circuncidados. Aquel que rechazara el ser circuncidado debía ser borrado
del pueblo (V. 14), eso es, morir prematura y misteriosamente.
La circuncisión
cobró importancia por cuatros aspectos: 1. como muestra de obediencia, 2.
marcaba una señal de pertenencia a un pueblo, 3. era una muestra de
desprenderse a una vida pecaminosa por la santificación, y 4. existía una
connotación de medida higiénica para los hombres. (v. 9-10)
En esa época de
Abraham era de vital importancia este acto para poder presentar un culto puro
al Dios verdadero. Esta era la señal de
la Iglesia del Antiguo Testamento, como lo es en el nuevo el bautismo, y por lo
tanto es llamado el “pacto de la circuncisión”.
La circuncisión
era una práctica común y regular en el Antiguo Oriente. Pero sólo el Antiguo
Testamento la invistió con semejante significado, haciéndola la marca de la
posición de Israel en el pacto, “la señal del pacto”. Más adelante, el orgullo
convirtió la circuncisión en un símbolo de idolatría, que los hebreos asumían
que les garantizaría el favor continuo de Dios. Una vez circuncidados, no había
marcha atrás. El hombre quedaba marcado para siempre como judío. (V. 11-14)
El significado
de la circuncisión está centrado en la sangre, como todo pacto. Así mismo Jesús
en un acto de derramarla en la cruz del calvario, nos generó un sello
invaluable en lo más profundo de nuestro ser. Esta inicia un proceso de
transformación en el creyente, llevándolo a descansar en su promesa y
fidelidad, más bien que en su propia carne.
¿Qué vas a hacer? ¿Cómo lo vas a
aplicar hoy? ¿En qué área?
Emocional ___ Familiar ___ Espiritual ___ Financiera ___
Otro ___.
Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.
¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele
Dios podría estar hablándole de Él
Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con él en oración.
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con él en oración.
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”
Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”