Enero 11 de 2025
La iglesia no cierra. Ahora más unidos, más cerca.
A LA ALTURA DEL REINO DE DIOS
Hechos 14:21-22
21 Después
de predicar la Buena Noticia en Derbe y de hacer muchos discípulos, Pablo y
Bernabé regresaron a Listra, Iconio y Antioquía de Pisidia, 22 donde
fortalecieron a los creyentes. Los animaron a continuar en la fe, y les
recordaron que debemos sufrir muchas privaciones para entrar en el reino de
Dios.
https://youtu.be/HN9qhr6t_Xg?si=ih1baVTQe73P4avn
Estimado Lector:
A pesar de todo, la obra de Dios continuó en diferentes
lugares. Pablo y Bernabé persistieron en su tarea, anunciando el evangelio y
formando discípulos.
Cuando decidieron regresar a Antioquía, recorrieron
nuevamente las ciudades que habían visitado previamente, con el propósito de
fortalecer a los cristianos en esas comunidades. Para ellos, no se trataba solo
de obtener conversiones; tenían una profunda pasión por hacer discípulos.
El mensaje que compartieron fue claro: "Es necesario
que a través de muchas tribulaciones entremos en el reino de Dios." Este
mensaje sirvió para fortalecer y exhortar a los discípulos, aunque para muchos
ha quedado olvidado en la actualidad. Se tiende a percibir las tribulaciones
como algo contraproducente para la vida cristiana. Sin embargo, este mensaje
era simple y estaba respaldado por la experiencia personal de Pablo, quien lo
predicaba porque lo había vivido. En el plan de Dios, el sufrimiento ocupa un
lugar significativo y transformador.
Se invita a renovar la fe, recordando que el fruto de la
tribulación es la fe, como se menciona en Hebreos 11:6. Cada proceso vivido
añade estatura espiritual al estar en el reino de Dios.
Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.
¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele
Dios podría estar hablándole de Él
Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”
Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”