Noviembre 03 de 2022
AMAR AL PRÓJIMO
Lucas 3:4-12 4 Isaías había hablado de
Juan cuando dijo: «Es una voz que clama en el
desierto: 7 Cuando las multitudes
acudieron a Juan para que los bautizara, les dijo: —¡Camada de víboras!
¿Quién les advirtió que huyeran de la ira que se acerca? 8 Demuestren con su forma
de vivir que se han arrepentido de sus pecados y han vuelto a Dios. No se
digan simplemente el uno al otro: “Estamos a salvo porque somos descendientes
de Abraham”. Eso no significa nada, porque les digo que Dios puede crear
hijos de Abraham de estas mismas piedras. 9 Ahora mismo el hacha del
juicio de Dios está lista para cortar las raíces de los árboles. Así es, todo
árbol que no produzca buenos frutos será cortado y arrojado al fuego. 10 Las multitudes
preguntaron: —¿Qué debemos hacer? 11 Juan contestó: —Si tienes dos camisas,
da una a los pobres. Si tienes comida, comparte con los que tienen hambre. 12 Hasta los corruptos
cobradores de impuestos vinieron a bautizarse y preguntaron: —Maestro, ¿qué debemos
hacer?
Estimado
lector,
Juan
se encontraba predicando al pueblo, para que este se arrepintiera y así
pudiera alcanzar la remisión de pecados. El bautismo en agua que realizaba
era una señal externa de la purificación interna y consecuentemente con ello
la renovación de los corazones. Esta renovación debía ser acompañada por un
cambio de pensamiento y de actitudes, por ello expresaba que hacer el bien al
prójimo era una evidencia de ese cambio interior.
Muchos
cristianos, aun bautizados, no muestran su condición ante el mundo. El
hacerse seguidor de Cristo, implica no solo ser renovados en el
entendimiento, en la manera de pensar, sino que esta condición debe
reflejarse en mostrar el amor de Cristo al prójimo.
El
verdadero cristiano no es el que se bautiza, sino quien cumple con ese gran
mandamiento de amar al prójimo como a sí mismo.
¿Qué
te dice Dios en este día? ¿Cómo
lo vas a aplicar hoy? ¿En
qué área específica de tu vida? Emocional
_ Familiar _ Espiritual _ Financiera _ Otro _
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Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.
¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele
Dios podría estar hablándole de Él
Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”
Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”