Marzo 30 de 2023
COMO TAMBIÉN NOSOTROS PERDONAMOS A LOS QUE NOS OFENDEN
2 Corintios 2:5-7
5 No exagero cuando digo que el
hombre que causó todos los problemas los lastimó más a todos ustedes que a mí. 6 La mayoría de ustedes se le
opusieron, y eso ya fue suficiente castigo. 7 No obstante, ahora es tiempo
de perdonarlo y consolarlo; de otro modo, podría ser vencido por el desaliento.
Estimado Lector,
Cierto miembro de la Iglesia de Corinto había cometido
una falta muy grave, razón por la cual fue rechazado por la congregación,
incluso después de haberse arrepentido.
Ante esta situación, Pablo mostró una verdadera
sabiduría y compasión pastoral, al exhortarlos a considerar la reprensión y
perdonar aquel hombre. Así como animarlos a la restauración de este hombre
arrepentido.
En ocasiones, las malas acciones pueden llegar a herir
no solo a los implicados, sino también a toda la Iglesia. Sin embargo, hay
sabiduría divina en saber cuándo confrontar y en dejar tiempo para sanar las
heridas, permitiendo un cambio de mente.
La verdadera señal del arrepentimiento es el dolor y
la tristeza por lo que se ha hecho. Por supuesto, el objetivo de la disciplina
es conducir a alguien a su recuperación, sin embargo, cuando eso sucede, es
hora de brindar perdón y amor restaurador; recordando siempre las multitudes de
pecados que Dios nos perdona a nosotros mismos y dando por gracia lo que por
gracia inmerecida hemos recibido.
¿Qué te dice Dios en este día?
¿Cómo lo vas a aplicar hoy?
¿En qué área específica de tu vida?
Emocional _ Familiar _ Espiritual _ Financiera _ Otro
_
Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.
¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele
Dios podría estar hablándole de Él
Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”
Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”