CONFIANZA EN EL SEÑOR: ESCUDO Y BENDICIONES VERDADERAS

Diciembre 05 de 2024

La iglesia no cierra. Ahora más unidos, más cerca.

 

CONFIANZA EN EL SEÑOR: ESCUDO Y BENDICIONES VERDADERAS

 

SALMOS 115:9-13

¡Oh Israel, confía en el Señor!
    Él es tu ayudador y tu escudo.
10 ¡Oh sacerdotes, descendientes de Aarón, confíen en el Señor!
    Él es su ayudador y su escudo.
11 ¡Todos los que temen al Señor, confíen en el Señor!
    Él es su ayudador y su escudo.

12 El Señor se acuerda de nosotros y nos bendecirá.
    Bendecirá al pueblo de Israel
    y bendecirá a los sacerdotes, los descendientes de Aarón.
13 Bendecirá a los que temen al Señor,
    tanto a los grandes como a los humildes.

 

https://youtu.be/yDdyDDAWRcM?si=FYGRCiqJWBzjGlIL

 

Estimado lector:

 

Este es un llamado a confiar plenamente en Dios, quien es el protector y proveedor fiel. El salmista exhorta a todo el pueblo de Dios a confiar en Él como su ayuda y escudo. Se destaca que Dios no solo está presente en las vidas de los creyentes, sino que actúa activamente para protegerlos. Él es el escudo que los cubre y defiende de todo peligro, ya sea físico o espiritual, y siempre está dispuesto a socorrer a Sus hijos en momentos de necesidad.

El salmo subraya la diferencia esencial entre Dios y los ídolos. Aunque los ídolos estén elaborados con materiales valiosos como oro o plata, son completamente inútiles (v. 4-7). No pueden ver, escuchar ni actuar. En contraste, Dios se acuerda de Su pueblo (v. 12), lo cual implica que está profundamente involucrado en la vida de aquellos que le temen. Este recuerdo no es solo un pensamiento pasajero, sino una muestra de Su compromiso constante y activo.

Los versículos 12 y 13 enfatizan que la fidelidad de Dios no depende de la posición o los méritos humanos, sino de la fe depositada en Él. Para Dios, no hay distinciones: cada persona que le teme y le busca es igualmente valiosa a Sus ojos.

Este es el mensaje central: Dios es la fuente suprema de seguridad y bendición, y Su fidelidad es inquebrantable

 

4 pasos que te ayudarán a tener un tiempo con Dios.


Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.

  1. Lea despacio
  2. Lea en voz alta
  3. Mientras esté leyendo pregúntele a Dios:

¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele


Dios podría estar hablándole de Él

  1. ¿Quién es Él?
  2. ¿Cuáles son sus características?
  3. ¿Qué hará?

Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:

  • P ¿Será un PECADO que debo confesar?
  • A ¿Será una ACTITUD que debo adoptar?
  • M ¿Será un MANDAMIENTO que debo obedecer?
  • P ¿Será una PROMESA que debo reclamar?
  • E ¿Será un EJEMPLO que debo seguir o evitar?

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. Pida PERDÓN: Confiese su pecado, arrepiéntase y reciba el perdón de Dios
  2. De GRACIAS: Agradezca a Dios por sus muchas bendiciones y promesas
  3. Por FAVOR: Ore por sus necesidades y las de otros; salvación, sanidad, protección
  4. Finalice diciendo TE AMO. Termine este tiempo en adoración y alabanza

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. ¿Qué le habló Dios?
  2. ¿Cómo esto cambiará sus perspectivas?
  3. ¿Cómo aplicará esto en su vida diaria?

Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”

Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”

DEVOCIONALES