EL ALTAR.

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https://youtu.be/Dk8-XvhgQvs

Josué 22:13-20

¹³ Pero antes enviaron una delegación a cargo de Finees, hijo del sacerdote Eleazar, para hablar con la tribu de Rubén, la tribu de Gad y la media tribu de Manasés. 

¹⁴ La delegación estaba formada por diez líderes de Israel, cada uno pertenecía a una de las diez tribus y era cabeza de su familia dentro de los clanes de Israel.

¹⁵ Cuando llegaron a la tierra de Galaad, les dijeron a la tribu de Rubén, a la tribu de Gad y a la media tribu de Manasés:

¹⁶ —Toda la comunidad del Señor exige saber por qué están traicionando al Dios de Israel. ¿Cómo pudieron apartarse del Señor y construirse un altar en rebeldía contra él? 

¹⁷ ¿Acaso no fue suficiente el pecado que cometimos en Peor? Hasta el día de hoy, no estamos completamente limpios de ese pecado, incluso después de la plaga que azotó a toda la comunidad del Señor. 

¹⁸ Y ahora ustedes le dan la espalda al Señor. Si hoy ustedes se rebelan contra el Señor, mañana él se enojará con todos nosotros.

¹⁹ »Si necesitan el altar porque la tierra de ustedes es impura, entonces únanse a nosotros en la tierra del Señor, donde se encuentra el tabernáculo del Señor, y compartan nuestra tierra. Pero no se rebelen contra el Señor ni contra nosotros al construir un altar diferente del altar único y verdadero del Señor nuestro Dios. 

²⁰ ¿Acaso no cayó el enojo divino sobre toda la comunidad de Israel cuando Acán, un miembro del clan de Zera, pecó al robar las cosas que habían sido apartadas para el Señor^[a]? Él no fue el único que murió a causa de su pecado.

Estimado lector:

El pueblo de Israel y, específicamente, las tribus de Rubén, de Gad, y la media tribu de Manasés, decidieron levantar otros altares.

 Finees, hijo del sacerdote Eleazar, les recordó que, JEHOVÁ aborrece la idolatría.  Y los exhortó a volver al altar original, dejando atrás su rebeldía; porque esta les traería consecuencias, que repercutirían en sus familias.

Estas tribus habían olvidado que, JEHOVÁ es un DIOS celoso que no comparte su Gloria con nadie, porque es Único y Suficiente.

El pueblo escogido, olvidó que la Mano de Dios había obrado a su favor, hasta llegar a la tierra prometida. Y al llegar a ella, dejaron de lado principios fundamentales como la obediencia y el agradecimiento a JEHOVÁ. Y luego se esfumaron, porque ya no necesitaban esta tierra.

Esta es una invitación a recordar todo lo que DIOS ha hecho por cada uno, en el pasado. Es importante compartirlo con la descendencia, para que no olviden que solo existe un altar único y verdadero: JESUCRISTO, que, a través de Su Amor infinito, brinda un acceso directo al PADRE CELESTIAL.

Es importante preguntarse: ¿Cómo están hoy esos altares de: oración, adoración, congregación, estudio de Su Palabra, ¿de servicio y de ofrendas?

Hay que ser agradecidos, porque DIOS es puro amor y lo ha dado todo, sin que nadie merezca nada, para que cada uno, pueda disfrutar de Su Salvación.  Él merece ser amado y honrado con el servicio y la obediencia.

No hay que distraerse sirviendo a ídolos, bien sea consciente o inconscientemente, en el altar que solo le pertenece a DIOS.

Es importante enseñar a los hijos y a toda la descendencia que, absolutamente todo se lo debemos solo a ÉL.

¿Qué te dice Dios?

¿Qué vas a hacer?      ¿Cómo lo vas a aplicar hoy?   ¿En qué área? 

Emocional ___ Familiar ___ Espiritual ___ Financiera ___ Otro ___.