Diciembre 18 de 2024
EL BRAZO
DERECHO DEL SEÑOR
SALMOS 118:
15-18
15 Se entonan canciones de alegría y de
victoria en el campamento de los justos.
¡El fuerte brazo derecho del Señor ha hecho
proezas gloriosas!
16 El fuerte brazo derecho del Señor se
levanta triunfante.
¡El fuerte brazo derecho del Señor ha hecho
proezas gloriosas!
17 No moriré, sino que viviré
para contar lo que hizo el Señor.
18 El Señor me castigó severamente,
pero no me dejó morir.
https://youtu.be/2kcH4UpCjZ8?si=_yJmeddZCD2URSKd
Estimado
lector:
Esta parte del salmo
muestra la humillación del salmista ante el Señor, destacando que sus triunfos
y victorias, no dependían de sus propias fuerzas ni destrezas, sino de la
Fuerza Poderosa del Señor.
El versículo
17, habla de la seguridad que David guardaba en su corazón, de que no moriría
en manos de sus enemigos. Él sentía que, aún tenía un propósito por cumplir, y
que testificaría de la Grandeza y las maravillas de Dios. Reconocía que lo que
estaba viviendo, era una disciplina del Señor.
El brazo
derecho del Señor es Jesucristo mismo (Efesios 1:19-21), quien, con Su Poder y
Autoridad, sometería a Sus enemigos, y quien completó la Obra de Redención.
(Romanos 8:34)
Todo creyente,
al colocar toda su confianza en ese Brazo Derecho del Señor, no solo gozará de
Su Poder, sino que cuenta con Su intercesión ante el Padre, experimenta Su
amorosa protección y puede deleitarse en Su Presencia, con la seguridad de que
siempre será sustentado por Él, y le dará las fuerzas para enfrentar los retos
que presenta la vida.
Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.
¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele
Dios podría estar hablándole de Él
Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”
Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”