Abril 29 de 2023
EL COSTO DE SER MINISTRO DE DIOS
2 Corintios 6:3-5
3 Vivimos de tal manera que nadie tropezará a causa de
nosotros, y nadie encontrará ninguna falta en nuestro ministerio. 4 En todo lo que
hacemos, demostramos que somos verdaderos ministros de Dios. Con paciencia
soportamos dificultades y privaciones y calamidades de toda índole. 5 Fuimos
golpeados, encarcelados, enfrentamos a turbas enfurecidas, trabajamos hasta
quedar exhaustos, aguantamos noches sin dormir y pasamos hambre.
Estimado lector,
El apóstol con su
expresión no se refirió a evitar herir los sentimientos de otras personas.
Aunque es cierto que debemos cuidar nuestro comportamiento, hay personas que
son tan susceptibles, que se sienten agraviadas u ofendidas por cualquier
detalle de poca importancia. Por lo tanto, “no dar ninguna ocasión de tropiezo”
significa que deberíamos vivir de tal manera que nadie pueda señalarnos.
También Pablo se
refirió a las angustias. Con estas palabras estaba refiriéndose indudablemente
a experiencias vividas por él mismo, como otras de las circunstancias que se
mencionan en esta lista. Podríamos calificarlas como experiencias que llevan a
las personas al límite mismo de su capacidad de resistencia, o de
supervivencia. Y éstas son algunas de las pruebas que aquellas personas
dedicadas al servicio del Señor tienen que soportar en muchos lugares del
mundo.
Para Pablo, los
“azotes” consistieron en sesiones de cuarenta azotes en las cuales fue golpeado
con una vara. En nuestro caso, el equivalente podría haber sido en las
ocasiones en que nos hayamos sentido lastimados por una observación hiriente. Y
a veces tales golpes son causados por personas que profesan querernos.
Si queremos ser
“ministros de Dios”, debemos vivir una vida conforme a lo que vivió Jesús en
este mundo. ¡Él es nuestro espejo!
¿Qué te dice Dios en este día?
¿Cómo lo vas a aplicar hoy?
¿En qué área específica de tu vida?
Emocional _ Familiar _ Espiritual _ Financiera _ Otro
_
Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.
¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele
Dios podría estar hablándole de Él
Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”
Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”