Marzo 15 de 2025
HABLANDO SU PALABRA
SALMOS 119:169-176
Tau = Salvación
Tau
169 Oh Señor,
escucha mi clamor;
dame la capacidad de discernir que me prometiste.
170 Escucha mi oración;
rescátame como lo prometiste.
171 Que la alabanza fluya de mis labios,
porque me has enseñado tus decretos.
172 Que mi lengua cante de tu palabra,
porque todos tus mandatos son correctos.
173 Tiéndeme una mano de ayuda,
porque opté por seguir tus mandamientos.
174 Oh Señor, he anhelado que me rescates,
y tus enseñanzas son mi deleite.
175 Déjame vivir para que pueda alabarte,
y que tus ordenanzas me ayuden.
176 He andado descarriado como una oveja perdida;
ven a buscarme,
porque no me he olvidado de tus mandatos.
https://youtu.be/vPHrzRPIYzg?si=rj_Ghe1dSlrOhq-T
Estimado lector:
El tema central de esta última estrofa del Salmo 119 es la salvación.
En primer lugar, el salmista clama a Dios, pidiendo ser rescatado conforme a su
promesa: “escucha mi clamor”, “rescátame como prometiste”, “tiéndeme tu mano
amiga para socorrerme” y “he deseado tu salvación”.
El salmista reconoce que, en algún momento, estuvo descarriado como una oveja perdida, pero Dios lo salvó y le dio vida. Esta es una realidad que afecta a toda la humanidad, pues todos han pecado y se han apartado del buen camino, tal como lo expresa, Isaías 53:6.
"Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada
cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos
nosotros."
La obra de salvación se llevó a cabo a través del
sacrificio del Cordero de Dios, quien llevó sobre sí los pecados de la
humanidad y murió en lugar de todos, con el propósito de reconciliar a las
personas con Dios y otorgarles vida eterna (Isaías 53:5; 10-11)
La salvación pertenece a Dios, quien está sentado en el
trono, y al Cordero. A Él le corresponden la bendición, la gloria, la
sabiduría, la acción de gracias, la honra, el
poder y la fortaleza.
Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.
¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele
Dios podría estar hablándole de Él
Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”
Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”