LA CONFIANZA EN SÍ MISMO DE LOS MALVADOS

Marzo 09 de 2024

La iglesia no cierra. Ahora más unidos, más cerca.

 

LA CONFIANZA EN SÍ MISMO DE LOS MALVADOS

 

SALMOS 52:1-5

¿Por qué te jactas de tus delitos, gran guerrero?
    ¿No te das cuenta de que la justicia de Dios permanece para siempre?
2 Todo el día conspiras destrucción.
    Tu lengua es cortante como una navaja afilada;
    eres experto en decir mentiras.
3 Amas el mal más que el bien
    y las mentiras más que la verdad. Interludio

4 Te encanta destruir a la gente con tus palabras,
    ¡mentiroso!
5 Pero Dios te herirá de muerte de una vez por todas;
    te sacará de tu casa
    y te desarraigará de la tierra de los vivientes.

 

https://youtu.be/SaUCMlyPqJ4?si=ByGLY7KOmBEz5u1E

 

Estimado lector:

 

Este Salmo ilustra el principio eterno de que el triunfo del poder del mal es breve. El salmista denuncia primero la prepotencia de los poderosos, que no dudan en recurrir a la mentira y a la calumnia con tal de llevar a cabo sus malos propósitos. Luego anuncia el justo castigo que espera a tales personas, poniéndolo en contraste con la paz y la prosperidad de las que goza él mismo a causa de su confianza en Dios.

 

El salmista no se dirige a una persona en particular, sino que dialoga con un personaje imaginario, que representa a todos los que solo confían en su poder y en sus riquezas. De este modo, su denuncia profética adquiere mayor fuerza.

 

Que no se engañe el transgresor de la ley de Dios pensando que Dios practicará el indulto generalizado. Suficiente ha advertido a través de su palabra que la paciencia tiene un límite, en resumen, el malvado cree que por siempre estará en victoria, pero desconoce que violenta y repentinamente será arrancado de su casa y de sus posesiones y pagará de acuerdo con lo que ha hecho.

 

El hombre malo es arrancado y desarraigado cómo se hace con un árbol enfermo, que no da buen fruto. Esta situación está en agudo contraste con la figura del justo, representada por un árbol frondoso en la casa de Dios.

 

4 pasos que te ayudarán a tener un tiempo con Dios.


Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.

  1. Lea despacio
  2. Lea en voz alta
  3. Mientras esté leyendo pregúntele a Dios:

¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele


Dios podría estar hablándole de Él

  1. ¿Quién es Él?
  2. ¿Cuáles son sus características?
  3. ¿Qué hará?

Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:

  • P ¿Será un PECADO que debo confesar?
  • A ¿Será una ACTITUD que debo adoptar?
  • M ¿Será un MANDAMIENTO que debo obedecer?
  • P ¿Será una PROMESA que debo reclamar?
  • E ¿Será un EJEMPLO que debo seguir o evitar?

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. Pida PERDÓN: Confiese su pecado, arrepiéntase y reciba el perdón de Dios
  2. De GRACIAS: Agradezca a Dios por sus muchas bendiciones y promesas
  3. Por FAVOR: Ore por sus necesidades y las de otros; salvación, sanidad, protección
  4. Finalice diciendo TE AMO. Termine este tiempo en adoración y alabanza

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. ¿Qué le habló Dios?
  2. ¿Cómo esto cambiará sus perspectivas?
  3. ¿Cómo aplicará esto en su vida diaria?

Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”

Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”

DEVOCIONALES