Febrero 17 de 2024
LA
NOVIA LLENA DE BELLEZA POR DENTRO Y POR FUERA
SALMOS 45:10-17
10 Escúchame, oh hija de la realeza; toma en serio lo
que te digo:
olvídate de tu pueblo y de tu
familia, que están lejos.
11 Pues
tu esposo, el rey, se deleita en tu belleza;
hónralo, porque él es tu señor.
12 La
princesa de Tiro te colmará de regalos;
los ricos suplicarán tu favor.
13 La
novia, una princesa, luce gloriosa
en su vestido dorado.
14 Con
sus hermosas vestiduras la llevan ante el rey,
acompañada por sus damas de
honor.
15 ¡Qué
procesión tan alegre y entusiasta,
cuando entran en el palacio del
rey!
16 Tus hijos se convertirán en
reyes como su padre;
los harás gobernantes de muchas
tierras.
17 Traeré
honra a tu nombre en todas las generaciones;
por eso, las naciones te
alabarán por siempre y para siempre.
https://youtu.be/MlS-K7xriVE?si=JVWFF1UDIJFvqTCy
Estimado
lector:
El
salmista le habló a la novia, dándole guía y aliento.
Usando
el concepto de Génesis 2:24, se trataba de una invitación a esta hija
real, a dejar su pueblo y la casa de su padre, para unirse al Rey ungido en
matrimonio.
Dado
que la belleza del Rey estaba en su carácter (Salmo 45:2), la belleza de la novia
incluía el carácter. Ella veía que su esposo era su Señor, digno
de adoración.
La
hija real recibía grandes beneficios, porque estaba unida al Rey en una
relación de amor comprometido. Y, era toda gloriosa, no por ella misma sino por
su conexión con el Rey.
Se
pronunció una bendición sobre el matrimonio del rey ungido: Que cuando los
padres no estuvieran, serían reemplazados por hijos provenientes del
matrimonio; porque el legado del Rey pasaría de generación en generación, para
que su nombre, fuera siempre recordado.
No
se puede leer esto, sin aplicarlo a cómo Jesús ve a su novia. Porque, aunque se
puedan percibir fallas en la iglesia, Jesús la ve: toda gloriosa. Es su novia, su pueblo, comprado con sangre.
La
belleza del creyente, cautiva a su creador. Hay que preguntarse, si hace falta
belleza espiritual.
Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.
¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele
Dios podría estar hablándole de Él
Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”
Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”