Diciembre 14 de 2022
LA UNCIÓN EN EL ANTIGUO TESTAMENTO
Levítico 8:1-13
1 Habló Jehová a Moisés, diciendo: 2 Toma a Aarón
y a sus hijos con él, y las vestiduras, el aceite de la unción, el becerro de
la expiación, los dos carneros, y el canastillo de los panes sin levadura; 3 y
reúne toda la congregación a la puerta del tabernáculo de reunión. 4 Hizo,
pues, Moisés como Jehová le mandó, y se reunió la congregación a la puerta del
tabernáculo de reunión.
5 Y dijo Moisés a la congregación:
Esto es lo que Jehová ha mandado hacer. 6 Entonces Moisés hizo acercarse a Aarón y a
sus hijos, y los lavó con agua. 7 Y puso sobre
él la túnica, y le ciñó con el cinto; le vistió después el manto, y puso sobre
él el efod, y lo ciñó con el cinto del efod, y lo ajustó con él. 8 Luego
le puso encima el pectoral, y puso dentro del mismo los Urim y Tumim. 9 Después
puso la mitra sobre su cabeza, y sobre la mitra, en frente, puso la lámina de
oro, la diadema santa, como Jehová había mandado a Moisés.
10 Y tomó Moisés el aceite de la
unción y ungió el tabernáculo y todas las cosas que estaban en él, y las
santificó. 11 Y roció de él sobre el altar siete veces,
y ungió el altar y todos sus utensilios, y la fuente y su base, para
santificarlos. 12 Y derramó del aceite de la
unción sobre la cabeza de Aarón, y lo ungió para santificarlo. 13 Después
Moisés hizo acercarse los hijos de Aarón, y les vistió las túnicas, les ciñó
con cintos, y les ajustó las tiaras, como Jehová lo había mandado a Moisés.
Estimado Lector:
La intención original de Dios era convertir a toda la
nación de Israel en un reino de sacerdotes y en un pueblo santo, consagrado a
Él (Éxodo 19:6). Pero su pecado, en el grave incidente del becerro de oro,
impidió ese proyecto divino. En lugar de todo el pueblo, solo una tribu resultó
elegida, la tribu de Leví. Y de esta tribu, solo un hombre, Aarón, fue escogido
como el sumo sacerdote. Por lo tanto, el libro del Levítico fue escrito para
los miembros de la tribu de Leví.
En el antiguo testamento, la palabra Unción,
significaba la acción de derramar aceite especial, sobre la cabeza de alguien,
para consagrarlo como rey o sacerdote y presentarlo en servicio a Dios
La ceremonia establecida en Éxodo 29:1 era para
apartar a los sacerdotes para el propósito y la voluntad de Dios. Ya que en Jesús somos «sacerdocio santo […]
real sacerdocio» (1 Pedro 2:5, 9), hay mucho que aprender por analogía en esta
ceremonia de consagración. Dios quiere que seamos apartados para su propósito y
voluntad, y usa estos principios para lograr ese objetivo.
La iglesia constituye, en la actualidad, un sacerdocio
y Cristo es el gran Sumo Sacerdote (hebreos 8:1)
Cada aspecto del sacerdocio decretado por Dios ha sido
cumplido en nuestro Sumo Sacerdote, el Señor Jesucristo. Cuando Él entra como
nuestro Señor y Salvador, nos invita a servirle como Sus sacerdotes
representativos.
¿Hemos entrado a esta asombrosa herencia?
¿Qué te dice Dios en este día?
¿Cómo lo vas a aplicar hoy?
¿En qué área específica de tu vida?
Emocional _ Familiar _ Espiritual _ Financiera _ Otro
_
Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.
¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele
Dios podría estar hablándole de Él
Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”
Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”