NO MERECÍAMOS SU PAZ, PERO POR GRACIA LA RECIBIMOS

Diciembre 28 de 2022

La iglesia no cierra. Ahora más unidos, más cerca.

NO MERECÍAMOS SU PAZ, PERO POR GRACIA LA RECIBIMOS

 

https://youtu.be/_VAYgLIWZjs

 

 

Lucas 2:13-14

13 De pronto, se unió a ese ángel una inmensa multitud—los ejércitos celestiales—que alababan a Dios y decían:

14 «Gloria a Dios en el cielo más alto
    y paz en la tierra para aquellos en quienes Dios se complace».

 

 

Estimado lector:

 

En el nacimiento de Jesús, se ve el contraste entre la gloria angelical con sus

anuncios y cánticos, y el humilde lugar donde se encontraba el Mesías; algo que debió parecer extremo en aquel momento

(Lucas 2: 10-12). Y es que Dios muestra Su Gloria, donde menos se espera (2 Corintios 4:7).

 

En este pasaje, se ven situaciones extremas: por un lado, un grupo de pastores cuyas declaraciones no eran tenidas en cuenta; y por el otro, una multitud de ángeles declarando que, la buena voluntad de Dios para con los hombres, se veía manifestada en el envío del Mesías. Y aunque todas las obras de Dios son para Su Gloria, la redención del mundo es para Su Mayor Gloria en las alturas.

 

La buena voluntad de Dios al enviar al Mesías, trajo paz a este mundo caído. Esa paz, fluye en cada creyente, a través de Cristo (Juan 14:27).

 

Tanto para aquellos pastores como para los creyentes de hoy, por medio del nacimiento del Mesías, Dios ha extendido Su favor, sin haber hecho nada para merecerlo. Y, por Su Gracia, concede la paz que proviene de la salvación, restaurando las relaciones entre Dios y el pueblo

pecador (2 Corintios 5: 18-21).

 

 

¿Qué te dice Dios en este día?

¿Cómo lo vas a aplicar hoy?

¿En qué área específica de tu vida?

Emocional _ Familiar _ Espiritual _ Financiera _ Otro _

 

 

4 pasos que te ayudarán a tener un tiempo con Dios.


Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.

  1. Lea despacio
  2. Lea en voz alta
  3. Mientras esté leyendo pregúntele a Dios:

¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele


Dios podría estar hablándole de Él

  1. ¿Quién es Él?
  2. ¿Cuáles son sus características?
  3. ¿Qué hará?

Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:

  • P ¿Será un PECADO que debo confesar?
  • A ¿Será una ACTITUD que debo adoptar?
  • M ¿Será un MANDAMIENTO que debo obedecer?
  • P ¿Será una PROMESA que debo reclamar?
  • E ¿Será un EJEMPLO que debo seguir o evitar?

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. Pida PERDÓN: Confiese su pecado, arrepiéntase y reciba el perdón de Dios
  2. De GRACIAS: Agradezca a Dios por sus muchas bendiciones y promesas
  3. Por FAVOR: Ore por sus necesidades y las de otros; salvación, sanidad, protección
  4. Finalice diciendo TE AMO. Termine este tiempo en adoración y alabanza

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. ¿Qué le habló Dios?
  2. ¿Cómo esto cambiará sus perspectivas?
  3. ¿Cómo aplicará esto en su vida diaria?

Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”

Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”

DEVOCIONALES