NO SÉ PARA EL IMPÍO, PERO PARA MÍ, EL VIVIR ES CRISTO

Junio 28 de 2024

La iglesia no cierra. Ahora más unidos, más cerca.

NO SÉ PARA EL IMPÍO, PERO PARA MÍ, EL VIVIR ES CRISTO


SALMOS 73:21-24

21 Entonces me di cuenta de que mi corazón se llenó de amargura,

    y yo estaba destrozado por dentro.

22 Fui tan necio e ignorante;

    debo haberte parecido un animal sin entendimiento.

23 Sin embargo, todavía te pertenezco;

    me tomas de la mano derecha.

24 Me guías con tu consejo

    y me conduces a un destino glorioso.


https://youtu.be/deLD0MnTEFY?si=PVUhjvj1AF6GOH_g



Estimado lector, 


Este salmo expresa claramente el sentir momentáneo del creyente frente a la prosperidad del impío. El salmista se detuvo a pensar y a preguntarse el porqué de esta condición tan contradictoria: "Yo sirvo al Señor y sufro, mientras el impío obra de mala manera y prospera. ¿Cómo puede ser?".

El desaliento lo llevó a comparar sus aflicciones con la aparente comodidad del impío. Sin embargo, su confianza en Dios y sus caminos se renovó cuando Dios le reveló el trágico fin de los malvados y la verdadera bendición de los justos. Al final, este problema, desde la perspectiva de la eternidad, será resuelto con la mayor bendición del creyente: la vida eterna, mientras que los impíos perecerán.

El salmista descubrió la actitud que lleva al triunfo de la fe. En esta vida transitoria, con todos sus problemas, el mayor bien de los creyentes es su comunión con Dios. No importa que prosperen los impíos. La esperanza y el tesoro de la vida del creyente es Dios mismo, guiándolos con Su Palabra y Su Espíritu, sosteniéndolos con Su poder y recibiéndolos después en la gloria del cielo.

“Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia” (Filipenses 1:21).



4 pasos que te ayudarán a tener un tiempo con Dios.


Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.

  1. Lea despacio
  2. Lea en voz alta
  3. Mientras esté leyendo pregúntele a Dios:

¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele


Dios podría estar hablándole de Él

  1. ¿Quién es Él?
  2. ¿Cuáles son sus características?
  3. ¿Qué hará?

Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:

  • P ¿Será un PECADO que debo confesar?
  • A ¿Será una ACTITUD que debo adoptar?
  • M ¿Será un MANDAMIENTO que debo obedecer?
  • P ¿Será una PROMESA que debo reclamar?
  • E ¿Será un EJEMPLO que debo seguir o evitar?

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. Pida PERDÓN: Confiese su pecado, arrepiéntase y reciba el perdón de Dios
  2. De GRACIAS: Agradezca a Dios por sus muchas bendiciones y promesas
  3. Por FAVOR: Ore por sus necesidades y las de otros; salvación, sanidad, protección
  4. Finalice diciendo TE AMO. Termine este tiempo en adoración y alabanza

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. ¿Qué le habló Dios?
  2. ¿Cómo esto cambiará sus perspectivas?
  3. ¿Cómo aplicará esto en su vida diaria?

Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”

Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”

DEVOCIONALES