Octubre 24 de 2024
UN JUICIO DIVINO
SALMOS 106:13-18
13 Sin
embargo, ¡qué pronto olvidaron lo que él había hecho!
¡No quisieron esperar su consejo!
14 En el desierto dieron rienda suelta a sus deseos;
pusieron a prueba la paciencia de Dios en esa tierra
árida y baldía.
15 Entonces les dio lo que pedían,
pero al mismo tiempo les envió una plaga.
16 La gente del campamento se puso celosa de Moisés
y tuvo envidia de Aarón, el santo sacerdote
del Señor.
17 Por esa causa la tierra se abrió;
se tragó a Datán
y enterró a Abiram junto con los otros rebeldes.
18 Sobre sus seguidores cayó fuego;
una llama consumió a los perversos.
https://youtu.be/OVzalpEQzPc?si=5QmTOGdC62i5Re_B
Estimado lector:
Israel pasó rápidamente de la fe a la ingratitud. La fe,
apoyada en lo que pudieron ver, fue fuerte y fácil de cantar; pero la tensión y
el estrés regresaron, el Poder de Dios fue olvidado y dejaron de buscar Su
consejo.
Atacaron a Moisés y a Aarón. A Moisés, por envidia (Números
16:3 y 16,13); en lugar de agradecerle, por su dedicado y arduo trabajo en el
campamento, aunque haya cometido errores (Éxodo 32). Aarón, por su parte,
también erró; pero había sido el sacerdote designado por
Dios.
Coré dirigió esta rebelión, con sus dos aliados:
Datán y Abiram.
Pero, después, se abrió la tierra, y se tragó a todos los
hombres de Coré, y a todos sus bienes. (Números 16: 31-32).
También salió fuego de delante de Jehová, y consumió a los
doscientos cincuenta hombres que ofrecían el incienso. (Números 16:35).
Cuando se permite que los anhelos impíos gobiernen la vida
y se cae en la envidia, Dios puede enviar mortandad al alma. Es mejor
negarse a esos anhelos, y disfrutar de un alma limpia y sana.
Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.
¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele
Dios podría estar hablándole de Él
Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”
Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”