UN MALENTENDIDO SOLUCIONADO CON AMOR.

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Josué 22:21-25              

21 Entonces la gente de Rubén, de Gad y de la media tribu de Manasés les respondieron a esos líderes, cabezas de los clanes de Israel:

22 —¡El Señor, el Poderoso, es Dios! ¡El Señor, el Poderoso, es Dios! Él conoce la verdad, ¡y que Israel también la sepa! Nosotros no construimos el altar por traición o en rebeldía contra el Señor. Si fuera así, no nos perdonen la vida ni un día más. 

23 Si en verdad construimos un altar para nosotros, para apartarnos del Señor o para presentar ofrendas quemadas, ofrendas de grano u ofrendas de paz, que el Señor mismo nos castigue.

24 »La verdad es que construimos este altar porque tenemos miedo de que, en el futuro, sus descendientes les digan a los nuestros: “¿Qué derecho tienen ustedes de adorar al Señor, Dios de Israel? 

25 El Señor ha puesto el río Jordán como una barrera entre nuestra gente y ustedes, gente de Rubén y de Gad. Ustedes no tienen derecho de afirmar que pertenecen al Señor”. Así, los descendientes de ustedes podrían impedirles a los nuestros que adoraran al Señor.

Estimado lector

Los hijos de Israel estaban dispuestos a enfrentar a sus hermanos del este porque ellos creían que habían edificado un altar en desafío al Señor.

Josué y el pueblo de Israel enviaron una delegación para tratar de resolver el problema amigablemente, demostrando de esta manera el amor de un pueblo hacia el otro y lograr así una reconciliación.

La reconciliación se logró gracias a la buena forma en que se manejó el conflicto, trayendo como consecuencia la fidelidad y el amor entre estos pueblos.

Esta situación enseña dos lecciones:

1. La verdad y el amor continúan bajo el nuevo pacto. La verdad de Dios debe ser defendida sin hacer concesiones, sin embargo, esta defensa debe hacerse con amor hacia aquellos a quienes desean oponerse.

               2. Hay que tener en cuenta que en algunas ocasiones podemos ser mal interpretados, y cuando esto sucede nuestro primer refugio es Dios.

Dios conoce nuestros corazones, nos llena de paz y tranquilidad por estar bien delante de Él, aunque estemos mal delante de aquellos que no nos entienden y que quizás no lo conocen.

¿Qué te dice Dios?

¿Qué vas a hacer?      ¿Cómo lo vas a aplicar hoy?   ¿En qué área? 

Emocional ___ Familiar ___ Espiritual ___ Financiera ___ Otro ___.