UNA APARICIÓN CON PODER PARA RECIBIR PODER

Noviembre 02 de 2022

La iglesia no cierra. Ahora más unidos, más cerca.

UNA APARICIÓN CON PODER PARA RECIBIR PODER

 

https://youtu.be/ZcIpzLaC8BA

 

Lucas 24:44-53

44 Entonces dijo: «Cuando estaba con ustedes antes, les dije que tenía que cumplirse todo lo escrito acerca de mí en la ley de Moisés, en los profetas y en los Salmos». 

45 Entonces les abrió la mente para que entendieran las Escrituras, 

46 y dijo: «Efectivamente, se escribió hace mucho tiempo que el Mesías debería sufrir, morir y resucitar al tercer día. 

47 También se escribió que este mensaje se proclamaría con la autoridad de su nombre a todas las naciones, comenzando con Jerusalén: “Hay perdón de pecados para todos los que se arrepientan”. 

48 Ustedes son testigos de todas estas cosas.

49 »Ahora enviaré al Espíritu Santo, tal como prometió mi Padre; pero quédense aquí en la ciudad hasta que el Espíritu Santo venga y los llene con poder del cielo».

50 Entonces Jesús los llevó a Betania, levantó sus manos al cielo y los bendijo. 

51 Mientras los bendecía, los dejó y fue levantado al cielo. 

52 Entonces ellos lo adoraron y regresaron a Jerusalén llenos de gran alegría; 

53 y pasaban todo su tiempo en el templo, adorando a Dios.

 

 

 

Estimado lector:

 

En la segunda aparición de Jesús a sus discípulos, después de su resurrección, les habló acerca del cumplimiento de la profecía y de la importancia de lo que significaba su resurrección como una de las verdades fundamentales del evangelio. En esta ocasión fue bien especial, dice la Palabra que “les abrió el entendimiento” para que los discípulos pudieran comprobar la veracidad de las escrituras de principio a fin.

 

El Señor les dejó claro que para que el perdón de los pecados fuera una realidad en sus vidas debía darse una condición especial: un arrepentimiento genuino.

 

En ese mismo instante, Cristo instituye la Gran Comisión como una tarea obligatoria de la iglesia. Para el cumplimiento de este propósito, Cristo les confirma que el Padre la hará realidad y se cumplirá revistiendo a sus discípulos de “Poder desde lo Alto” refiriéndose al derramamiento del Espíritu Santo sobre la vida de todos los creyentes.

 

Después de comprender esta verdad se puede tener claro que para cumplir con la Gran Comisión y llevar una vida de santidad en la tierra necesitamos de ese Poder de lo Alto, el cual está disponible para todos. Solo se debe anhelar y se debe buscar con pasión, pues, Dios está dispuesto a derramarlo sobre todo aquel que lo pida. ¿Lo deseas?

 

¿Qué te dice Dios en este día?

¿Cómo lo vas a aplicar hoy?

¿En qué área específica de tu vida?

Emocional _ Familiar _ Espiritual _ Financiera _ Otro _

 

4 pasos que te ayudarán a tener un tiempo con Dios.


Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.

  1. Lea despacio
  2. Lea en voz alta
  3. Mientras esté leyendo pregúntele a Dios:

¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele


Dios podría estar hablándole de Él

  1. ¿Quién es Él?
  2. ¿Cuáles son sus características?
  3. ¿Qué hará?

Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:

  • P ¿Será un PECADO que debo confesar?
  • A ¿Será una ACTITUD que debo adoptar?
  • M ¿Será un MANDAMIENTO que debo obedecer?
  • P ¿Será una PROMESA que debo reclamar?
  • E ¿Será un EJEMPLO que debo seguir o evitar?

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. Pida PERDÓN: Confiese su pecado, arrepiéntase y reciba el perdón de Dios
  2. De GRACIAS: Agradezca a Dios por sus muchas bendiciones y promesas
  3. Por FAVOR: Ore por sus necesidades y las de otros; salvación, sanidad, protección
  4. Finalice diciendo TE AMO. Termine este tiempo en adoración y alabanza

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. ¿Qué le habló Dios?
  2. ¿Cómo esto cambiará sus perspectivas?
  3. ¿Cómo aplicará esto en su vida diaria?

Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”

Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”

DEVOCIONALES