UNA SÚPLICA TRANSFORMADA EN GOZO
Salmos 28:6-9
6 ¡Alaben al Señor!
Pues
él oyó que clamaba por misericordia.
7 El Señor es mi fortaleza y mi escudo;
confío
en él con todo mi corazón.
Me da su ayuda y mi corazón se llena de alegría;
prorrumpo
en canciones de acción de gracias.
8 El Señor le
da fuerza a su pueblo;
es
una fortaleza segura para su rey ungido.
9 ¡Salva
a tu pueblo!
Bendice
a Israel, tu posesión más preciada.
Guíalos como un pastor
y
llévalos en tus brazos por siempre.
https://youtu.be/pbvRmBx8zsE
Estimado
lector:
David pudo
ver que, todas sus oraciones al Señor fueron escuchadas y respondidas.
A raíz de
esto, el salmista experimentó un nuevo estado de ánimo. Antes, había estado
agobiado, pidiendo auxilio, para no verse envuelto en la suerte de los impíos.
Pero, al ver la respuesta de Dios, se sintió plenamente confiado en la justicia
divina; y experimentó gran gozo y gratitud, por haber sido escuchado en su
súplica de auxilio.
En los
salmos, como en la vida, es normal que
se presenten estos cambios de ánimo. Cuando el Señor responde favorablemente a
las súplicas, hay un sentimiento de rejuvenecimiento espiritual y físico en el
corazón.
Y, se
comparte con todo el pueblo de Dios, esta hermosa experiencia, para reafirmar
esa Verdad de la Palabra, que enuncia: “Todo aquel que cree en el Señor, no
será avergonzado”.
Y, para que
todos puedan experimentar, que hay un Padre, que escucha las peticiones de Sus
hijos, los salva, bendice, pastorea y enaltece (V9).
¿Qué te dice Dios en este día?
¿Cómo lo vas a aplicar hoy?
¿En qué área específica de tu vida?
Emocional _ Familiar _ Espiritual _ Financiera _ Otro
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