Y TÚ… ¿A QUIÉN IMITAS?

Septiembre 14 de 2022

La iglesia no cierra. Ahora más unidos, más cerca.

Y TÚ…  ¿A QUIÉN IMITAS?

 

https://youtu.be/vPHrzRPIYzg

 

 

1 Corintios 4:16-17

16 Así que les ruego que me imiten.

17 Por esa razón les envié a Timoteo, mi fiel y amado hijo en el Señor. Él les recordará la manera en que sigo a Cristo Jesús, así como lo enseño en todas las iglesias en todas partes.

 

Estimado lector

 

Cuando Pablo rogó a los cristianos de Corinto que lo imitasen, generó muchas   reacciones de rechazo, pues él era visto a los ojos de muchos como un débil, vagabundo y golpeado; con hambre y sed, que además se vestía pobremente, y trabajaba con trabajo manual para mantenerse. La gente de la época lo miraba como escoria y desecho. Dios permitió todo esto en la vida de Pablo para mostrar el poder de su gloria, y no el poder de un hombre. 

 

El evangelio eficaz es de palabra y poder del Espíritu Santo; el que transforma vidas, libra a personas de la esclavitud del pecado y de Satanás, renueva por dentro y por fuera, consuela, fortalece y afirma a los santos, lo que no puede hacerse con palabras persuasivas de hombres, sino a través el poder de Dios.

 

Si se le preguntase a Pablo, ¿por qué imitarlo? Él podría haber respondido, “Imítenme, porque la gloria y el poder de Jesucristo brillan a través de mí, por el Espíritu Santo”.

 

Es que Pablo, con su ejemplo de vida, tenía todo el derecho de rogarles y exhortarles como un padre amoroso que imitasen a Jesucristo, como él lo imitaba y lo enseñaba por todas las iglesias.

 

Aplicación personal

¿A quién imitas? ¿Quién es tu guía en cada área de tu vida?

 

¿Estamos cuidando a nuestros hijos espirituales?

¿Qué te dice Dios en este día?

¿Cómo lo vas a aplicar hoy?

¿En qué área específica de tu vida?

Emocional _ Familiar _ Espiritual _ Financiera _ Otro _

 

 

4 pasos que te ayudarán a tener un tiempo con Dios.


Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.

  1. Lea despacio
  2. Lea en voz alta
  3. Mientras esté leyendo pregúntele a Dios:

¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele


Dios podría estar hablándole de Él

  1. ¿Quién es Él?
  2. ¿Cuáles son sus características?
  3. ¿Qué hará?

Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:

  • P ¿Será un PECADO que debo confesar?
  • A ¿Será una ACTITUD que debo adoptar?
  • M ¿Será un MANDAMIENTO que debo obedecer?
  • P ¿Será una PROMESA que debo reclamar?
  • E ¿Será un EJEMPLO que debo seguir o evitar?

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. Pida PERDÓN: Confiese su pecado, arrepiéntase y reciba el perdón de Dios
  2. De GRACIAS: Agradezca a Dios por sus muchas bendiciones y promesas
  3. Por FAVOR: Ore por sus necesidades y las de otros; salvación, sanidad, protección
  4. Finalice diciendo TE AMO. Termine este tiempo en adoración y alabanza

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. ¿Qué le habló Dios?
  2. ¿Cómo esto cambiará sus perspectivas?
  3. ¿Cómo aplicará esto en su vida diaria?

Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”

Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”

DEVOCIONALES