Marzo 12 de 2025
DIOS ESTÁ CERCA
SALMOS 119:145-152
Cof
145 Oro
con todo el corazón; ¡respóndeme, Señor!
Obedeceré tus decretos.
146 A ti clamo; rescátame
para que pueda obedecer tus leyes.
147 Me levanto temprano, antes de que salga el sol;
clamo en busca de ayuda y pongo mi esperanza en tus
palabras.
148 Me quedo despierto durante toda la noche,
pensando en tu promesa.
149 Oh Señor, en tu fiel amor oye mi clamor;
que el seguir tus ordenanzas me reanime.
150 Los que no respetan la ley vienen a atacarme;
viven alejados de tus enseñanzas.
151 Pero tú estás cerca, oh Señor,
y todos tus mandatos son ciertos.
152 Desde los primeros días
sé que tus leyes durarán para siempre.
https://youtu.be/tVzO75zO14Y?si=1cnbEon3LiZprnZn
Estimado lector:
La Palabra de Dios afirma que las oraciones siempre tienen
respuesta, pues Él está cerca y escucha. La diferencia entre oír un ruido y
escuchar una oración radica en la comprensión y en la respuesta conforme a lo
pedido.
El versículo 148 muestra al salmista en vigilia, meditando
en la promesa divina. Esto refleja un conocimiento profundo de la Palabra y una
actitud de espera confiada en la bendición.
Como cuerpo de Cristo, la Iglesia debe ser fiel a Dios,
llenando su corazón de su amor, caminando conforme a su voluntad y extendiendo
ese amor al prójimo a través de la Palabra. No importa qué oposición surja, la
confianza debe permanecer en lo que declara 2 Crónicas 20:15: "No temáis
ni os amedrentéis... porque no es vuestra la guerra, sino de Dios."
La oración es el altar más grande que se puede ofrecer a
Dios. La Palabra está escrita para ser consultada en todo momento, pues la
naturaleza humana tiende al olvido. Su veracidad es incuestionable, y su
cumplimiento trasciende el tiempo, manteniéndose vigente y eterna.
Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.
¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele
Dios podría estar hablándole de Él
Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”
Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”