Abril 01 de 2025
EL PUEBLO DE ISRAEL QUE PREVALECE
SALMOS 129:1-8 NTV
Cántico para los peregrinos que suben a
Jerusalén.
129 Desde mi temprana
juventud, mis enemigos me han perseguido.
Que todo Israel repita:
2 Desde mi temprana juventud, mis enemigos me han
perseguido,
pero nunca me derrotaron.
3 Tengo la espalda cubierta de heridas,
como si un agricultor hubiera arado largos surcos.
4 Pero el Señor es bueno;
cortó las cuerdas con que me ataban los impíos.
5 Que todos los que odian
a Jerusalén
retrocedan en vergonzosa derrota.
6 Que sean tan inútiles como la hierba que crece en un
techo,
que se pone amarilla a la mitad de su desarrollo,
7 que es ignorada por el cosechador
y despreciada por el que hace los manojos.
8 Y que los que pasan por allí
se nieguen a darles esta bendición:
«El Señor los bendiga;
los bendecimos en el nombre del Señor».
https://youtu.be/Z0oh7f5k24s?si=NoprmTZSc7vpI-jU
Estimado lector:
Los judíos fueron perseguidos durante siglos; sin embargo,
sus enemigos, nunca triunfaron ni prevalecieron contra ellos. Este es
su feliz testimonio.
Podría decirse que, el principal logro del pueblo judío ha
sido la supervivencia. “Los judíos son los pueblos étnicos distintos más
duraderos del planeta. Han sido calumniados, odiados, perseguidos, expulsados,
asediados y asesinados a lo largo de su larga existencia, pero han sobrevivido
intactos”.
Los enemigos de Israel eran fuertes e inteligentes; pero no
más grandes que Dios, quien libró a Su pueblo de los impíos, que los
restringían y esclavizaban. El salmista no solo oraba para que los israelitas
fueran librados de sus enemigos, sino también para que Dios aplicara Su
justicia a sus enemigos.
La bendición de Dios es lo más grande que puede disfrutar
la vida humana, proporcionando bondad a todos los aspectos de la vida. Y, el
salmista oraba para que no la recibieran los que odiaban a Jerusalén e Israel.
El creyente, como pueblo de Israel insertado por
JESUCRISTO, debe apropiarse de esta promesa de prevalecer por Su Infinita
Misericordia. No hay guerra que se levante contra el creyente, porque ya JEHOVÁ
venció.
Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.
¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele
Dios podría estar hablándole de Él
Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”
Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”