EN CRISTO VERDADERAMENTE HAY RESTAURACIÓN

Agosto 03 de 2024

La iglesia no cierra. Ahora más unidos, más cerca.

EN CRISTO VERDADERAMENTE HAY RESTAURACIÓN


SALMOS 80:12-19

12 Pero ahora, ¿por qué has derribado nuestras murallas

    de modo que todos los que pasan pueden robarse nuestros frutos?

13 Los jabalíes del bosque los devoran,

    y los animales salvajes se alimentan de ellos.

14 Te suplicamos que regreses, oh Dios de los Ejércitos Celestiales.

    Observa desde los cielos y mira nuestro aprieto.

Cuida de esta vid

15     que tú mismo plantaste,

    este hijo que criaste para ti.

16 Somos cortados y quemados por nuestros enemigos;

    que perezcan al ver tu ceño fruncido.

17 Fortalece al hombre que amas,

    al hijo que elegiste.

18 Entonces jamás volveremos a abandonarte.

    Revívenos para que podamos invocar tu nombre una vez más.

19 Haznos volver a ti, oh Señor Dios de los Ejércitos Celestiales;

    haz que tu rostro brille sobre nosotros.

    Solo entonces seremos salvos.


https://youtu.be/hn0tsteqWjM?si=uxjIryCzT-p0X2_R


Estimado lector: 

Este pasaje muestra que el desastre había caído sobre las tribus del norte, Efraín, Benjamín y Manasés, el antiguo "campamento de Efraín" (Números 2:18). Por eso, Asaf oraba en nombre de la nación con una súplica ferviente, rogando a Dios que regresara a ellos, que mirara la grandeza de su necesidad comparada con la destrucción que produce un animal salvaje en los cultivos frutales y que visitara esta vid que Él mismo había plantado.


En este contexto, Asaf sabía que la nación necesitaba liderazgo. Le pidió a Dios que estuviera con un hombre en particular y que lo bendijera. Con la expresión del verso 17 "Fortalece al hombre que amas, al hijo que elegiste", Asaf quizás pensó primero en el actual rey de Israel; pero, en última instancia, el Varón Amado, el Hijo Elegido de Dios, es Jesucristo. En la fortaleza de este Hijo del Hombre, el pueblo de Dios sería restaurado a la fidelidad. Serían vueltos a la vida y una vez más invocarían Su nombre.


Tanto para Israel en ese tiempo como para la Iglesia en la actualidad, esta oración ferviente ya ha sido respondida en Cristo Jesús. En Él, los creyentes pueden ser verdaderamente restaurados a Dios; en Él, la iglesia puede ser realmente redimida de la esclavitud del pecado; solo en Él, la humanidad puede ser salva y ver que la gracia de Dios resplandece sobre ella.


4 pasos que te ayudarán a tener un tiempo con Dios.


Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.

  1. Lea despacio
  2. Lea en voz alta
  3. Mientras esté leyendo pregúntele a Dios:

¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele


Dios podría estar hablándole de Él

  1. ¿Quién es Él?
  2. ¿Cuáles son sus características?
  3. ¿Qué hará?

Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:

  • P ¿Será un PECADO que debo confesar?
  • A ¿Será una ACTITUD que debo adoptar?
  • M ¿Será un MANDAMIENTO que debo obedecer?
  • P ¿Será una PROMESA que debo reclamar?
  • E ¿Será un EJEMPLO que debo seguir o evitar?

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. Pida PERDÓN: Confiese su pecado, arrepiéntase y reciba el perdón de Dios
  2. De GRACIAS: Agradezca a Dios por sus muchas bendiciones y promesas
  3. Por FAVOR: Ore por sus necesidades y las de otros; salvación, sanidad, protección
  4. Finalice diciendo TE AMO. Termine este tiempo en adoración y alabanza

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. ¿Qué le habló Dios?
  2. ¿Cómo esto cambiará sus perspectivas?
  3. ¿Cómo aplicará esto en su vida diaria?

Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”

Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”

DEVOCIONALES