Abril 02 de 2024
¡HAY
VICTORIA EN DIOS!
SALMOS
60:6-8
6 Por su santidad, Dios ha
prometido:
«Dividiré a Siquem con alegría
y mediré el valle de Sucot.
7 Galaad es mío,
y también Manasés.
Efraín, mi casco, producirá mis
guerreros,
y Judá, mi cetro, producirá mis reyes.
8 Pero Moab, mi lavamanos, se convertirá en mi siervo,
y sobre Edom me limpiaré los pies
y gritaré triunfante sobre Filistea».
https://youtu.be/hxFjyBWpIVk?si=UtGssCJNthmVIgR6
Estimado
lector:
Las
menciones específicas de Siquem, el valle de Sucot, Galaad, Manasés, Efraín y
Judá muestran que Dios no hablaba simbólicamente, sino geográficamente. Cabe
aclarar que, aunque es el Señor de toda la tierra, tiene un cuidado especial y
una consideración por la tierra de Israel.
En
este texto, Efraín es llamado un ‘casco’ literalmente, “la fortaleza de mi
cabeza” simbolizando fuerza. Judá, mi ‘cetro’ (Génesis 49:10) es símbolo del
dominio y el gobierno.
La
frase: "Pero Moab será mi lavamanos; sobre Edom echaré mi calzado"
expresa que como tanto Moab como Edom se destacaban por su orgullo (Isaías
16:6, Abdías 3), Dios les asigna lugares de humilde servicio.
Lo
que Dios promete lo cumple. Israel es una tierra especial para Él. Al ser
lavados por la sangre de Jesús, entramos a ser posesión especial para Dios. Así
que si en algún momento llegan pensamientos de creer que Dios se ha alejado de
ti, inclínate de rodillas delante de su presencia y clama para que te otorgue
su sabiduría y fortaleza para enfrentar el problema, sabiendo que en los
tiempos difíciles es cuando más debes acercarte a Dios.
Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.
¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele
Dios podría estar hablándole de Él
Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”
Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”