Marzo 11 de 2024
OLIVOS
BIEN PLANTADOS
SALMOS
52:6-9
6 Los justos lo verán y se asombrarán;
se reirán y dirán:
7 «Miren lo que les pasa a los guerreros poderosos
que no ponen su confianza en Dios,
sino que confían en sus riquezas
y se vuelven más y más atrevidos en su maldad».
8 Pero yo soy como un olivo que florece en la casa de
Dios
y siempre confiaré en su amor inagotable.
9 Te alabaré para siempre, oh Dios,
por lo que has hecho.
Confiaré en tu buen nombre
en presencia de tu pueblo fiel.
https://youtu.be/tSet0EXS8dA?si=KZpfENeZHpOoReJa
Estimado
lector:
Estos
versículos hacen referencia a aquellos que ponen su
confianza en sus propias riquezas, inteligencia, fuerzas y habilidades, olvidándose
de Dios. Serán objeto de burla y desprecio, ya que su necedad
se hace evidente.
Olvidarse
de Dios no solo conduce a decisiones erróneas, sino
que también, al no tener a Dios en sus vidas, su inclinación
al mal se vuelve inevitable, siendo atraídos hacia
acciones incorrectas como un medio para lograr el éxito
en sus propósitos.
Por
el contrario, aquel cuya confianza está en Dios, que
sigue la voluntad y el consejo divino, es como un olivo bien plantado, firme y
arraigado en la casa del Padre. Para que un árbol
florezca, necesita buena tierra, y no hay tierra más
fértil que donde mora el Altísimo,
ni mejor abono que obedecer su Palabra.
Para
ser como un olivo verde, se debe vivir en la fe y tener a Dios como confianza.
La misericordia y gracia experimentadas antes son evidencia de esto y
testimonio para el futuro. Una actitud de paciente espera se genera cuando un
creyente ha experimentado continuamente la bondad de Dios.
Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.
¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele
Dios podría estar hablándole de Él
Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”
Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”