Septiembre 02 de 2024
TENEMOS UN DIOS PODEROSO Y ETERNO
SALMOS 90:1-8
Señor, a lo largo de todas las generaciones,
¡tú has sido nuestro hogar!
2 Antes de que nacieran las montañas,
antes de que dieras vida a la tierra y al mundo,
desde el principio y hasta el fin, tú eres Dios.
3 Haces que la gente
vuelva al polvo con solo decir:
«¡Vuelvan al polvo, ustedes, mortales!».
4 Para ti, mil años son como un día pasajero,
tan breves como unas horas de la noche.
5 Arrasas a las personas como si fueran sueños que desaparecen.
Son como la hierba que brota en la mañana.
6 Por la mañana se abre y florece,
pero al anochecer está seca y marchita.
7 Nos marchitamos bajo tu enojo;
tu furia nos abruma.
8 Despliegas nuestros pecados delante de ti
—nuestros pecados secretos—y los ves todos.
https://youtu.be/-GziHFi80qg?si=ORi2NDO1nTxrNExO
Estimado lector:
Es probable que esta oración, atribuida a Moisés, haya sido
escrita durante los cuarenta años en que Dios hizo que su pueblo vagara por el
desierto como consecuencia de su infidelidad. Durante ese tiempo, una
generación desobediente murió, y Moisés, al ser testigo de este episodio, ora a
Dios pidiendo la restauración de Su gracia y bendición, reconociendo las
iniquidades y el castigo merecido por la desobediencia.
Cuando el hombre comprende su temporalidad en la tierra,
puede encontrar en Dios su Refugio seguro, ya que, por muy buena que sea la
vida, las cosas no siempre son como deberían, lo que trae descontento al
corazón humano y lo lleva a distanciarse y rebelarse contra Dios.
La eternidad de Dios, manifestada por Moisés en su oración,
es evidente; esto significa que Dios ha existido siempre, por toda la
eternidad, y nunca dejará de ser. Para Dios, mil años son como un instante.
Todo lo que existe fue creado por Él, y el mundo entero está bajo Su poder.
Dios tiene control sobre la vida y la muerte. Sin embargo, el ser humano está
tan aferrado a la vida que anhela ser eterno en la tierra.
Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.
¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele
Dios podría estar hablándole de Él
Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”
Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”