TODOS EN LA TIERRA DEBEMOS ALABAR A DIOS

Mayo 08 de 2025

La iglesia no cierra. Ahora más unidos, más cerca.

TODOS EN LA TIERRA DEBEMOS ALABAR A DIOS

 

SALMOS 148:7-12

Alaben al Señor desde la tierra,
    ustedes, criaturas de las profundidades del océano,
el fuego y el granizo, la nieve y las nubes,

    el viento y el clima que le obedecen,
ustedes, las montañas y todas las colinas,
    los árboles frutales y los cedros,
10 los animales salvajes y todo el ganado,
    los animales pequeños que corren por el suelo y las aves,
11 los reyes de la tierra y toda la gente,
    los gobernantes y los jueces de la tierra,
12 los muchachos y las jovencitas,
    los ancianos y los niños.

 

https://youtu.be/bYtdnJVwHnk?si=Xfei_YsF370DKyeN

 

Estimado lector:

 

La primera parte de este salmo llama a las cosas de los cielos a alabar al Señor. La tierra tampoco debe dejar de rendir su alabanza a Dios, y toda la creación debe unirse en esta adoración.

 

Los hombres y mujeres modernos cometen el error de adorar a la creación en lugar de al Creador. Se tiende a atribuir poderes creativos a la naturaleza y, prácticamente, a deificar la dinámica presente en los seres vivos. En oposición a este error pagano, el salmista recuerda que los mismos animales adoran a Dios.

 

Tras convocar a toda la creación a alabar a Dios, el hombre —para quien fue hecho todo lo creado, última y más perfecta obra de Dios, y redimido posteriormente por la sangre del Hijo de Dios encarnado— es exhortado a unirse y a llenar el coro universal del cielo y de la tierra. Es una certeza que todos los hombres y mujeres alabarán un día al Señor, como está escrito (Filipenses 2:10-11).

 

La alabanza no debe entenderse únicamente como una canción, sino como un estilo de vida. Una vida consagrada al Señor, obedeciendo cada uno de Sus mandamientos, transforma al creyente en un alabador consciente y constante, de modo que, a través de cada actitud y acción, se glorifica continuamente al Señor.

4 pasos que te ayudarán a tener un tiempo con Dios.


Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.

  1. Lea despacio
  2. Lea en voz alta
  3. Mientras esté leyendo pregúntele a Dios:

¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele


Dios podría estar hablándole de Él

  1. ¿Quién es Él?
  2. ¿Cuáles son sus características?
  3. ¿Qué hará?

Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:

  • P ¿Será un PECADO que debo confesar?
  • A ¿Será una ACTITUD que debo adoptar?
  • M ¿Será un MANDAMIENTO que debo obedecer?
  • P ¿Será una PROMESA que debo reclamar?
  • E ¿Será un EJEMPLO que debo seguir o evitar?

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. Pida PERDÓN: Confiese su pecado, arrepiéntase y reciba el perdón de Dios
  2. De GRACIAS: Agradezca a Dios por sus muchas bendiciones y promesas
  3. Por FAVOR: Ore por sus necesidades y las de otros; salvación, sanidad, protección
  4. Finalice diciendo TE AMO. Termine este tiempo en adoración y alabanza

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. ¿Qué le habló Dios?
  2. ¿Cómo esto cambiará sus perspectivas?
  3. ¿Cómo aplicará esto en su vida diaria?

Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”

Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”

DEVOCIONALES